Parece un chiste, pero ésta es la mejor forma de ayudar a un borracho... y a mucha gente.
Un vehículo en manos de un borracho es un arma mortal.
Una persona sobria podría accidentarse y matar a alguien sin quererlo.
Pero quien conduce borracho, lo hace a sabiendas de que puede matar a alguien y decide hacerlo.
Esa es la diferencia entre un accidente y un asesinato.
Quien conduce borracho, debe recibir el mismo trato que un asesino, aunque aún no haya matado a nadie. Conducir borracho es un acto voluntario en el cual se decide utilizar un arma mortal contra una victima inocente.
El que es detenido conduciendo ebrio debe acusársele de intento de asesinato.
El que es detenido conduciendo ebrio debe acusársele de intento de asesinato.
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