Morder la medalla de oro

Hace poco en los recientes juegos olímpicos en Río de Janeiro se suscitó mucha discusión en las redes sociales por el comentario malintencionado de que una deportista venezolana mordía la medalla de oro porque en su país ya no había que comer. 

Algunas personas rechazaron el comentario pidiendo respeto. (ver noticia aquí)

Sin embargo, si conocieran el verdadero significado de ese gesto, creo que todos los organizadores pedirían respeto  a los deportistas por morder la moneda.

Hace muchos años, cuando a alguien se le pagaba con una moneda de oro, quien la recibía la mordía para confirmar que no era falsa. El oro es un metal dúctil. Una marca de dientes en una moneda indicaría que posiblemente la moneda si era de oro. Al contrario, una moneda de pirita, por ejemplo, no se marcaría con la dentadura y podría afectar primero el diente.

Es decir, que quien muerde una moneda o una medalla de oro, desconfía de quien se la entrega...   

...o se siente presionado por el fotógrafo ignorante que tiene al frente. (que son los que generalmente incitan a los deportistas a morder sus medallas)

Si algún día yo me ganara una medalla de oro, no esperen que la muerda. Me daría pena hacerlo. La gente culta pensaría que soy desconfiado o que me estoy muriendo de hambre. 

Ahí les dejo la inquietud. 

Por cierto, las medallas de oro actuales están compuestas en un 98.4% de plata. Solo tienen oro en un 1.34%, tal como lo explica este infograma de Pictoline.

.