miércoles, 10 de julio de 2024

La vida de un escritor: Roald Dahl

 El siguiente texto lo encontré en la internet. Se le atribuye a Roald Dahl, aunque no pude confirmar su autoría a pesar de que varias páginas lo publican.  Desconozco la fuente original, pero me pareció interesante. 


La vida de un escritor

Por Roald Dahl


La vida de un escritor es un verdadero infierno comparada con la de un empleado. El escritor tiene que obligarse a trabajar. Ha de establecer sus propios horarios y si no acude a sentarse a su mesa de trabajo no hay nadie que lo amoneste. Si es autor de obras de ficción, vive en un mundo de temores. Cada nuevo día exige ideas nuevas, y jamás puede estar seguro de que se le vayan a ocurrir. Dos horas de trabajo dejan al autor de ficción absolutamente exhausto. Durante esas dos horas ha estado a leguas de distancia, ha sido otra persona, en un lugar distinto, con gente totalmente distinta, y el esfuerzo de volver al entorno habitual es muy grande. Es casi una conmoción. El escritor sale de su cuarto de trabajo como aturdido. Le apetece un trago. Lo necesita. Es un hecho que casi todos los autores de ficción beben más whisky del que les conviene para su salud. Lo hacen para darse fe, esperanza y ánimo. Es un insensato el que se empeña en ser escritor. Su única compensación es la libertad absoluta. No tiene quien le mande, salvo su propio espíritu, y eso, estoy seguro, es lo que le tienta.

_________________


Roald Dahl
(Llandaff, 13 de septiembre de 1916-Oxford, 23 de noviembre de 1990) fue un novelista, cuentista, poeta y guionista británico de ascendencia noruega. Entre sus obras más populares se encuentran Charlie y la fábrica de chocolate, James y el melocotón gigante, Matilda, El gran gigante bonachón, Agu Trot, Las brujas y Relatos de lo inesperado.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario