miércoles, 9 de octubre de 2019

84, Charing Cross Road

Esta semana quiero hablarles sobre uno de los libros más bellos que han llegado a mis manos: 84, CHARING CROSS ROAD, de la norteamericana Helene Hanff.

Es una obra que para cualquier amante de los libros será una delicia.

Este libro me encontró por casualidad (por que los libros son los que lo encuentran a uno), en medio de una conversación con mi amiga y gran lectora Flor Lopez y el profesor Memo Anjel.

84, Charing Cross Road no es un nombre común para un libro. Se trata en realidad de una dirección en Londres.

Cuando vi el ejemplar no le presté mucha atención, y menos con ese nombre. Bastó con abrirlo, y leer tan solo dos renglones y quedar enamorado perdidamente de la obra.


Y es que el libro consiste en una serie de cartas escritas entre 1949 y 1969 desde Nueva York, por Mrs. Helene Hanff ─una escritora casi anónima de guiones para televisión a una librería inglesa (Marks & Co., libreros), solicitando que le enviaran ejemplares usados de difícil consecución, pero en buen estado.

A lo largo de sus páginas va haciendo pedidos, regateando el precio, regañando al encargado (Frank Doel), y poco a poco, va metiéndose en la vida de los empleados de la librería y sus familias, con quienes construye una verdadera amistad a pesar de estar separados por el ancho océano.

¡Vamos, Frank Doel...! ¿Se puede saber que HACE usted ahí?. No veo que haga NADA, salvo pasarse todo el dia SENTADO. ¿Dónde esta el Leigh Hunt? ¿Donde está la Antología de la poesía inglesa de Oxford que el pedí? ¿Dónde mi Vulgata y ese querido y viejo loco de John Henry, con los que había pensado pasar horas de edificante lectura durante la Cuaresma? ¡No me envía usted NADA!

A su vez, la obsesiva compradora de libros, recibe no solo de Frank, sino también de otros empleados de la librería, además de los libros, cartas de gratitud, porque a lo largo de los años de amistad epistolar, estuvo enviándoles regalos preciosos y comida, en un momento en que la Inglaterra de la postguerra sufría racionamientos y pasaba dificultades.

Esta joya literaria es uno de los mejores libros que he leído sobre los libros y las personas que aman los libros. No solo se trata de cartas. Hay humor, ternura, amistad y lealtad en dichas páginas. Los amantes de los libros nos sentimos inmediatamente identificados por la forma como sus protagonistas se describen en sus cartas las portadas con letras doradas, la textura del papel, el olor de los libros, las alegrías al encontrar el ejemplar buscado, y también las decepciones cuando se lee un libro y se descubre que faltan capítulos o la impotencia de no poder conseguir la edición deseada.

A su vez, la obra da cuenta de lo que fue la posguerra. La misma Helene Hanff se disculpa con la gente de la librería porque los Estados Unidos, con una economía boyante, decide ayudar en la reconstrucción de Alemania y Japón, mientras que los ingleses pasan hambre y racionamiento en los años siguientes a la victoria, reconstruyendo en solitario su país.

También al avanzar en sus páginas se aprecian los comentarios de una lectora empedernida sobre obras de literatura poco conocidas que le iban llegando por correo a cambio de unos dólares.

Por último, es un bello homenaje al correo postal y a aquella época en que se se escribían cartas y se esperaba semanas para recibir una respuesta. Es una reivindicación nostálgica de la conversación epistolar en plena era del correo electrónico.

Definitivamente, un libro que habla de libros, de libreros y de lectores que aman con pasión una buena lectura.

Resulta paradójico que la misma Helene Hanff (1918-1997) haya sido casi toda su vida una escritora anónima, dedicada a escribir guiones para programas televisivos (fue una de las guionistas de la serie policíaca Ellery Queen) y obras de teatro, y solo haya alcanzado la fama publicando sus cartas.  

Sin embargo, cuando lean el libro entenderán qué lo hace tan especial.  

Se los recomiendo. 

Posdata. El libro se convirtió en una obra de teatro y una película (Anne Bancroft y Anthony Hopkins, nada menos, hacen el papel de Helene y Frank). Aunque aún no la he visto, me atrevo a decir que valdrá la pena verla. 

Helene Hanff
84, Charing Cross Road. 
Editorial Anagrama. 2002
126 páginas. 

Enlace externo para descargar el libro:  Haga click aquí

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Nota posterior.  Ya vi la película.  No se la pierdan. 



3 comentarios:

  1. Gracias carlos, Excelente reseña, lo recomendaré en mi tertulia literaria. Es un motivador para retomar el genero epistolar. Un abrazo.

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  2. Gracias Carlos. Que tarde de lectura tan maravillosa me diste. Espero conseguir el libro en una edición bonita, para exhibir el libro de la amante de los libros.
    Ángela

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  3. Siempre he tenido la idea de leerlo, pero no me decidía. Siempre me han ganado otros títulos, pero con tu reseña de seguro me animará más rápidamente. Mil gracias.

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